Pages - Menu

lunes, 14 de agosto de 2017

¿"ESTÁ BUENO" MOSTRAR UN FEMICIDIO?

Redacción. Lugar que se considera "la cocina" de un noticiero. Una periodista, frente al video donde se ve un montículo de tierra. Allí se descubrió un FEMICIDIO.
La mujer, al verlo, dice "Está bueno...Lo pasaría".

¿Qué hacer frente a eso?



¿Qué valor periodístico tiene? Más que el morbo en su máxima expresión, la fría y cruel imagen de la muerte, del horror y la criminalización formando parte del show. ¿Qué valor tiene llevarle a toda la audiencia la imagen de un pozo de tierra? ¿Para qué querrán escuchar las voces de los policías sorprendidos por un hallazgo tan macabro? En ese sitio se toparon con otro femicidio. Nada más y nada menos que eso. Y, con todo el dolor en la piel, a días del hecho, se difunde una imagen que poco aporta a su público. Sumaría a la causa, al investigador, a los fiscales, pero nada tiene que ver con el ciudadano que prende la TV para buscar INFORMARSE.

¿Qué estamos alimentando? Piensen en el almuerzo familiar frente a la televisión. Todos congregados mirando el noticiero. Piensen un poco más allá: Si pudieran elegir que mostrar y que no, eso significa tener en sus manos una decisión con una carga tremenda de responsabilidad. Ahora bien, si tuvieran el control remoto para optar por que ver. ¿Observarían con suma atención un video donde se ve el hallazgo de un cuerpo sin vida? Podría ser de un familiar suyo. ¿Lo harían? Habrá que tener sumo cuidado con la respuesta, porque se desnudarán sus escrúpulos. Quedaremos en evidencia con el nivel de hipocresía que nos movemos. Nos entristecemos ante una noticia tan trágica, nos indigna leer que hubo OTRO FEMICIDIO, cambiamos nuestras fotos de perfil, escribimos que estamos cansados de tanta impunidad. Sin embargo, todo parece olvidarse cuando el color ROJO invade la pantalla, la música electrizante paraliza, la voz del locutor grita efusivamente "¡ALERTA!", "¡ULTIMO MOMENTO!" o "¡URGENTE!". Se nos presenta una fría imagen. ¿Cuántas personas se quedarán a ver y cuántas cambiarán de canal? La indiferencia o la actitud pasiva, sumisa, convierte al otro en cómplice.

Algo nos tiene que quedar claro, tiene que ser indiscutido. NUNCA "ESTÁ BUENO" MOSTRAR UN FEMICIDIO. No nos tiene que apresurar la primicia porque esa meta, en esta inescrupulosa carrera llevaría a caminos incómodos, polémicos, de controversias, poco agradables.

La Defensoría del Público cuenta con una Guía para el tratamiento responsable
¿Qué es? Un material realizado en conjunto con organizaciones de lucha por los derechos de las mujeres y por la erradicación de la violencia que se ejerce contra ellas, y quienes trabajan en los servicios de comunicación audiovisual.



1. Recordar que la violencia contra las mujeres no se limita a la violencia física. También incluye, entre otras, la violencia psicológica, sexual, económica, mediática y patrimonial.

2. Informar a la persona que está o estuvo en situación de violencia sobre las posibles implicancias de la difusión mediática de su caso, ya que su visibilización y/o denuncia puede impactar en sus vínculos familiares, laborales, amistosos y sociales.

3. Proteger la intimidad y dignidad de la persona para evitar su revictimización mediática. Es fundamental atender a la especificidad de los casos que refieren a niñas y adolescentes, quienes poseen protecciones aún mayores debido al interés superior de sus derechos.

4. Evitar la obtención o reproducción de la imagen o la voz de una mujer en situación de violencia sin su consentimiento explícito.

5. Prescindir de abordajes que estigmaticen, culpabilicen, descrean y/o sexualicen a las mujeres en situación de violencia, y promover representaciones positivas de quienes están superando o han logrado sobreponerse a la violencia.

6. Privilegiar los enfoques centrados en la prevención y en la concientización de la problemática social de la violencia contra las mujeres, prescindiendo de la espectacularización y ficcionalización de los casos.

7. Chequear y diversificar las fuentes de la noticia y evitar la divulgación de información que pueda obstaculizar los procesos policiales o judiciales en curso.

8. Comunicar los casos a través del uso de imágenes y un lenguaje precisos y respetuosos que privilegien la información socialmente relevante.

9. Abordar la violencia contra las mujeres a través de la multiplicidad de géneros mediáticos sin banalizarla y procurar su seguimiento para evitar que los casos en particular y la problemática en general queden en el olvido.

10. Difundir los datos de organismos y políticas públicas, organizaciones sociales y personas que se especializan en la temática.




No hay comentarios.:

Publicar un comentario